Y en octubre leeremos ‘Parentesco’ de Octavia Butler
Hija de una empleada doméstica y un limpiabotas, Octavia Estelle Butler fue criada por su madre y su abuela en California, donde vivió en un ambiente profundamente religioso y anormalmente mixto en representación racial para la época. A pesar de ser diagnosticada con dislexia, empezó a escribir historias a los doce años, inspirada por los programas de monstruos de la televisión vespertina. Asistió a la universidad pública, donde estudió escritura creativa y escritura de guiones y participó en el movimiento de liberación negra. Tras graduarse en arte e historia adoptó una serie de trabajos a tiempo parcial, en busca de condiciones que le permitieran escribir.
Mucho tuvo que perseverar Butler para que sus primeras historias pudieran ver la luz. Fueron muchas páginas escritas hasta que se dio cuenta de que estaba intentando imitar a sus maestros de la ciencia-ficción, grupo exclusivamente varón y exclusivamente blanco. Ella no era ninguna de las dos cosas. Como no había ejemplos de autoras como ella, tuvo que inventarse. Su trabajo analiza las relaciones entre géneros, razas y especies: la explotación, las dinámicas de poder, sus orígenes y sus consecuencias, componiendo relatos realistas utilizando elementos históricos, fantásticos y tecnológicos. Creó un nuevo horizonte para la ficción.
Butler es una autora imprescindible de cualquier lista de grandes creadores de narrativa especulativa, y aunque de forma tardía, fue ampliamente considerada como tal en vida: varios de sus títulos fueron superventas, recibió dos premios Hugo y dos Nébula, y en 1995 fue la primera escritora de ciencia ficción en ser galardonada con una beca MacArthur. Sin embargo, tras su prematura muerte en 2006, su memoria fue desapareciendo, escondida en estanterías y cayéndose de mesas de recomendaciones y catálogos literarios.
Su presencia y su obra plantaron la semilla del afrofuturismo en el panorama literario actual: autoras como NK Jemisin, Nnedi Okorafor y Jesmyn Ward son algunas de sus dignas sucesoras. Todas ellas reconocen a Octavia E. Butler como su mentora y guía a través de los tiempos; en la vida y en la muerte, su trabajo prevalece.
¿Por qué hemos elegido este libro?
Parentesco es el libro más accesible de Octavia E. Butler, por no hablar de que también es el único traducido al español que se encuentran en catálogo actualmente (algunas traducciones los títulos de Xenogénesis y Parábolas se pueden encontrar en tiendas de segunda mano). Con una historia dinámica y clara y unos personajes muy bien delineados, Butler consigue mezclar elementos fantásticos con hechos históricos para componer un relato fascinante sobre ancestralidad, dinámicas de poder y justicia social.
Como autora marcadamente feminista y antirracista, creemos que Butler facilita oportunidades muy valiosas para el examen de nuestras propias conciencias feministas y antirracistas. La ficción, más que cualquier otra narrativa, nos otorga la capacidad de acercarnos a otras realidades. Dana, la protagonista de esta historia, vive y respira interseccionalidad, y sufre en su cuerpo todas sus consecuencias.
No queremos adelantaros nada más porque cuanto menos sepáis de esta historia antes de lanzaros a ella, mejor. ¡Que no os intimide su extensión! Su escritura es muy fluida y se lee como un rayo. Esperemos que os cautive tanto como a nosotras.
Parentesco, Octavia E. Butler. Capitán Swing. Traducción de Amelia Pérez de Villar. Barcelona, 2017. 328 páginas. 20 euros.